209 IV. Planteamiento Recuadro 13 Planeación territorial en Colombia La región andina está avanzando en la implementación de estrategias para alcanzar el desarrollo territorial, por lo que es imperativo hacer esfuerzos para evitar quedarnos rezagados. Colombia es un caso emblemático. A través del Plan de Desarrollo Territorial (PDT), un instrumento de gestión pública que se renueva cada periodo de gobierno, es factible articular a las diferentes autoridades subnacionales a fin de organizar objetivos y estrategias compartidas para lograr las ansiadas transformaciones en política económica, social y ambiental. De forma análoga (aunque ciertamente matizada) a lo que este documento propone como ruta para el desarrollo territorial en el caso peruano, el PDT colombiano se construye al compás de tres secciones principales: (1) el “diagnóstico”, espacio donde se describe el territorio, así como sus potencialidades y carencias; (2) la “estrategia”, donde se materializan las prioridades de los gobiernos departamentales y locales, definiendo de manera conjunta qué proyectos le corresponden a cada nivel administrativo; y (3) el “plan de inversión”, donde se exponen los recursos presupuestados y el plan de ejecución de los mismos en el mediano y corto plazo, con el objetivo de cubrir las brechas estimadas en las primeras dos secciones del PDT. No obstante, la implementación de planes como el descrito podrían caer en saco roto si no logran conectarse con visiones más integrales respecto de lo que implica realmente el desarrollo. En ese sentido, la formulación de los PDT demanda simultáneamente su articulación con el Plan Nacional de Desarrollo, el cual tiene como propósito impulsar una estructura territorial donde sea posible desarrollar diferentes apuestas regionales, y cuyo objetivo principal es construir una sociedad en paz, equitativa y educada (lo que responde a las secuelas causadas por el conflicto armado colombiano). Fuente: Adaptado de Departamento Nacional de Planeación de Colombia (s. f.).
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