La madrugada de ayer dejó de existir el empresario minero Guido Del Castillo Echegaray, quien a lo largo de su vida también destacó por su apoyo a la cultura y la educación, a través de los museos de minerales y el aporte a su alma máter la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI). 

Nació en el Cusco en 1934 y estudió en la Escuela Nacional de Ingenieros, graduándose como Ingeniero de Minas en el año 1955. La UNI le otorgó una beca de postgrado para estudiar en el Colorado School of Mines (USA).

Trabajó de mine foreman para la Cerro de Pasco Corp. Desarrolló la mina de San Vicente en Chanchamayo, Junín. En 1966 constituyó Minera Del Hill, compañía de servicios para el desarrollo de minas y en 1993 creó la compañía Bradley-MDH, especializada en perforación diamantina.

Desarrolló varios proyectos auríferos como Aruntani en Moquegua que entró en producción en el año 2004, Arasi en Puno en el 2005 y Anubi ubicado en Cusco en el 2010. En el 2013 puso en marcha el proyecto aurífero Apumayo y en el 2015 abre la mina Anama en el departamento de Apurímac. 

En el 2005 recibió la Antorcha de Habich, el máximo reconocimiento otorgado por la UNI a sus egresados y un año después fundó el Museo de Minerales Andrés Del Castillo en el centro de Lima, que ha brindado apoyo para la implementación de otros siete museos similares. En 2007, a través de Aruntani, donó acero y cemento para la construcción del hospital Diospi Suyana (Curahuasi, Apurímac), iniciativa de los médicos alemanes Klaus y Martina John.

Posteriormente, en 2011 la UNI le confirió el título de Doctor Honoris Causa, en reconocimiento a su amplia y destacada trayectoria profesional. Después asumió la presidencia del Patronato de la UNI. En 2015, fue reconocido en la tradicional reunión de las Chalinas Coloradas en el Club de la Banca y Comercio.

En enero de 2018 la alta dirección de la Society of Economic Geologists lo distinguió como Honorary Fellow, convirtiéndose así en el primer sudamericano en recibir tal distinción.

En noviembre del año pasado, hizo la presentación del libro Historias de un minero, donde describe experiencias personales y un resumen de los cambios experimentados en el país desde la revolución del 3 de octubre de 1968 hasta la segunda década del siglo XXI.

En una de sus últimas apariciones públicas, en diciembre de 2019, la UNI en reconocimiento a su compromiso con la educación y el desarrollo del país le otorgó la distinción honorífica Orden “Presidente Manuel Pardo y Lavalle”, en ceremonia realizada en la sede de esa casa de estudios superiores.   

En su intervención, el rector Jorge Alva Hurtado, manifestó su plena seguridad de representar a estudiantes, docentes, administrativos y egresados, al expresar el reconocimiento institucional al empresario minero “por su ilimitada generosidad a favor de la juventud estudiosa”.