Libro La Tierra y sus minerales

163 CARMELITO Cierta vez, un hombre malo hizo trabajar a Carmelito levantado muchos andenes. Haba rocas duras, poca tierra y muchos bofedales. Carmelito se esforzaba cada da y as pasó 3 semanas. Su familia estaba preocupada. Carmelito no llegaba. El d a de pago, el hombre malo le dijo: —¡Bueno Carmelo, los andenes no quedaron bien! Carmelito se sintió triste, porque hab a puesto todo su esfuerzo y los andenes estaban hermosos. —¡Mira que soy bueno, es por ello que te dar aquel cerro para que aprendas a hacer andenes y siembres para llevar cosecha a tu familia! —concluyó el hombre malo con una voz de burla. Carmelito miró el cerro, era una peña rocosa, muy accidentada, y dijo: —¡Mana wasi ch´usaq maki r´ymanchu, maskipas tunaspas, tarpuyman chaymanta allin willaywan chayayman! (¡No ir a casa con las manos vac as, aunque sea tunas sembrar y con buenas noticias llegar !). El hombre malo le entregó unos papeles y se fue. Carmelito trabajó en los nuevos andenes. Las rocas fueron duras. Sus manos se llenaron de callos. Tuvo hambre, pero su prome-

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