tas de plata, cobre, estaño y de otros minerales. De pronto, escuchó una voz, muy c lida y amigable, que era de una pepita de cobre quien le dijo: —¡Hola soy Cubi! Luego, muy asombrado le preguntó: —¿Eres oro puro?, ¿cómo te llamas? Doro le respondió: —Hola. S, soy oro puro y me llamo Doro. Dime Cubi, ¿qu hacen todos estos minerales aqu ? Cubi le respondió que, al igual que l, todos buscaban aventuras y algunos por azares de su suerte haban cado en la cueva sin esperarlo. Adem s de ello, le contó que hab a personas que iban a buscarlos como tesoros del inca. Sin embargo, Doro ya haba esperado mucho tiempo y nadie se lo llevaba. Cubi tuvo curiosidad de saber por qu Doro quera pertenecer a alguien, cuando l podra escoger ser libre y no estar siempre encerrado. Por ello, le dijo: —All afuera hay un mundo inmenso y puedes ser libre viendo la naturaleza y sobre todo puedes divertirte hasta el cansancio. LA TIERRA Y SUS MINERALES 210
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