215 NUESTRA ROCA MADRE La plata con aparente malestar le respondió: —Eso es falso, mi color es el m s bello que hay. Finalmente, el oro dijo algo exaltado: —Todo lo que dicen son puras mentiras mi brillo y ductilidad, sin mencionar mi precio, hacen que yo sea el mineral m s caro. Mientras tanto, cuando los pobladores estaban conversando, surgió una gran tormenta que pod a afectarlos. El m s anciano y respetado de la comunidad dijo: —Hermanos y hermanas nuestro campamento est amenazado por la lluvia, que ser muy fuerte este año, por eso debemos recoger todas las piedras que sean posibles para construir una defensa contra el ro que sin duda se desbordar . Los pobladores r pidamente empezaron con el trabajo, pero se dieron cuenta que a pesar de utilizar muchas piedras no eran suficientes para construir una defensa que los protegiera de las inundaciones. Los minerales que cre an que eran muy valiosos se dieron cuenta que no podan ayudar al campamento y que su brillo y valor no eran tan importantes como pensaban. Cuando todos ya perdan las esperanzas apareció, a bordo de un tren, que vena a toda velocidad, la roca madre, que a pesar
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