Libro La Tierra y sus minerales

As lo hicieron, pero Cobrito se quedó sorprendido al darse cuenta de que no resultó. —Son unos vivos, pusieron su mismo nombre, no se vale, son unos tramposos, tenan que poner de quien creen que es el mejor mineral —expresó. Cobrito quedó todo pensativo y reflexionó: —¿Cómo podemos solucionar esto? —¡Ya s ! y si hacemos una competencia de carrera —dijo Cobrito. —¡Claro, claro! Mejor prepar monos para mañana —señalaron todos. Por la mañana, muy temprano, Cobrito estaba listo con su silbato para empezar la carrera. —En sus marcas, listos... —dijo y tocó el silbato. Todos empezaron a correr, corr an y corr an, de pronto empezaron a quedarse atr s Orón, Platn, Plomn, llegando a ganar Zinc; pero todos reclamaron: —¡No es justo!, yo peso m s —dijo Plom n. —¡Noooo! Zinc salió antes —dijo Orón. —¡El viento se lo llevó, el viento se lo llevó! —gritó Plat n. LA TIERRA Y SUS MINERALES 24

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