Libro La Tierra y sus minerales | Segunda edición

87 86 La Tierra y sus minerales Lima Había una vez un pueblo llamado San Miguel de Curí, situado en la provincia de Castrovirreyna, en la región de Huancavelica. Hace mucho tiempo, vivía en ese lugar una familia formada por la señora Amancia Lucano y su esposo, Eleuterio Morales. Ellos se dedicaban a la siembra de trigo. Sus hijos, conforme iban creciendo, los ayudaban en la chacra y en la siembra. Se llamaban Selena y Mathias. Tan pronto como Selena creció, fue aprendiendo todo el trabajo en la chacra. Era una niña muy vivaz, a quien le gustaba leer y cantar. Un día, mientras estaba en plena cosecha del trigo, escuchó el canto de las aves, y desde entonces le gustaba mucho escucharlo. Pasaron los años, y la La perseverancia Briseyda Selena Morales Lucano Institución Educativa “Juan Pablo Vizcardo y Guzmán” niña fue creciendo. Amaba la naturaleza y también los libros, porque cada vez que los leía, se adentraba en un mundo lejano y maravilloso, donde todos los pobladores eran felices y no les faltaba nada. Un día, cuando ya tenía 13 años, de pronto escuchó a su papá y a algunos señores de su comunidad decir que el pueblo mejoraría. Ella se puso feliz. Todos los días leía y estudiaba con ahínco y mucho empeño. Además, enseñaba a leer a su hermanito, y a él le gustaba mucho. Poco después, camiones y personas con uniformes y guantes llegaron al pueblo. Ella pensó que esos cambios serían para mejorar el pueblo de San Miguel de Curí. Sin embargo, pronto notó que los pájaros dejaron de cantar y, en su lugar, se escuchaba el sonido de las máquinas y motores de los camiones. Los pobladores del lugar se reunían, y ella trataba siempre de estar presente para escuchar lo que dialogaban los señores de la comunidad. Un día, decidió investigar por su cuenta qué es lo que hacían esas máquinas y los camiones. Así, logró La perseverancia

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